Aquí, en la esquina del universo, las estrellas que amo, se asoman a mi cielo, el aire va endulzando todos los movimientos, de la luna que mira, cada vez que me muevo.Por fin, ese secreto se descubre en mis ojos, se me entrega en los sueños, me acompaña en las noches de oscuro desaliento, ya no tengo mas dudas, ya no tengo mas miedos...
1 comentario:
Cuando la soledad nos brinda su cara más fría, mirar el cielo nos brinda una compañía inexplicable; quizá convierta nuestro tiempo en melancolía, o abrace con un cuerpo oscuro, más sin embargo, el universo nos llena de fuerza, nuestro instinto nos dice que lo miremos, sea de noche, sea de día, miramos al cielo y nos abrimos, y sin saberlo recibimos de él una generosidad sin límite que nos calma y nos alivia...
Un abrazo tan cercano como la luna, desde tu tierra, para tu alma que a veces se pierde mas que se encuentra... Un abrazo tan cercano como el sol, que desde la distancia justa nos calienta. Un abrazo, amiga, que te traiga de vuelta aunque sea en forma de poema...
Besos,
Bego.
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