jueves, 21 de octubre de 2010

brillando


Temblando,
sin poder apartar mis ojos
de tu boca,
con la piel en puro desamor,
con los sueños
siguiendo tu camino,
queriendo romper todas las olas,
subir todos los montes...
andar todos y cada uno de los destinos
que me tocan...

La carne
llaga viva de tanto desconsuelo,
el corazón
un animal ahuyandole a una luna
que no me da consuelo.

Pero estoy sabiendo
que por fin,
yo tenía razón
mis ojos son
tu cielo.


1 comentario:

PRINTOVA dijo...

Admirable poema amiga nines, un amor irresistible, que te atrapa y por el que no puedes vivir.
Versos muy profundos y sentidos.

Un besote enorme amiga.